QUE TIEMPOS AQUELLOS

Que lejos quedó el 2002 en los hinchas «Tricolores». Que lejos está aquella final con Villa Iris en cancha de Centenario, donde el equipo conducido por Oscar Mazzone empató 2-2 con nueve jugadores y obtuvo el título al imponerse en su cancha 1-0. Qué lejos esta aquella final donde más de 1500 personas se hicieron presentes en La Colonia.

El presente del Club Atlético Neuquén es muy distinto a aquel fin de año del 2002. Si bien el comienzo de ese torneo fue similar, en cuanto a problemas institucionales y económicos, se refiere, el cierre de la temporada fue a toda orquesta. Hoy, el conjunto ubicado en corazón del barrio Bouquet Roldan, marcha en la anteúltima ubicación en la tabla de posiciones de LIFUNE (Liga de Fútbol de Neuquén) con tan solo ocho unidades de las 39 que ya se pusieron en juego.

En lo institucional los problemas nunca mermaron. Se fue Mazzone y la mayoría de los jugadores que salieron campeones y hoy hay muchos pibes que salieron de la cantera del club, lo cual disminuye el gasto en el plantel. Sin embargo, la poca afluencia de público, producto de los magros resultados, sumado a la poca participación social en la vida institucional del «Tricolor» provoca que todo el esfuerzo de los padres y dirigentes que colaboran con la entidad sea en vano.

Aún no se pueden terminar los albergues del club que comenzaron hace casí una decada. es imposible poner en condiciones el campo de juego que luego de llover se convierte en un salitral. Es dificil entender como uno de los clubes, que a finales de la decada del 80 y principio del 90, era el más rico en infraestructura producto de su nacimiento a través de fusiones con otras entidades y hoy corre el peligro de desaparecer como tantas otras instituciones a lo largo del país.